El regreso de Blood axis ya es toda una realidad, comenzando con este single compartido con Andrew King a modo de adelanto de lo que será su largamente esperado nuevo álbum, “Born again”. También para este año se planea una colección de temas cedidos a recopilatorios en la última década (“Ultimacy”), pero antes de todo ello, nos ocupamos de este excelente split que presenta la primera canción que escuchamos de Blood axis en muchos años, de hecho hay que remontarse a 2005 cuando aportó su último tema conocido en el compendio “Looking for Europe” o más aún hasta el año 2002 cuando se creo la extraordinaria obra “Absinthe: Le Folie Verte” junto con LJDLP. Escaso bagaje en los últimos tiempos para uno de los referentes más importantes y reconocidos de la escena, quienes crearon trabajos memorables que todavía permanecen imborrables en la historia reciente de la música neofolk. Sin embargo, tal vez por esa reducida aportación, también existen opiniones que han visto en Blood axis a un grupo sobrevalorado, siendo acusados, includo, de contener en sus textos mensajes escondidos más allá de lo estrictamente musical. Lo que es innegable es el interés de Michael Moynihan por distintas culturas, mitologías y tradiciones, junto con su labor como periodista y escritor (en la historia del Black metal no faltan referencias a su libro “Lord of chaos”) en diversas publicaciones. Una de las cuestiones que más me interesaban con este regreso era conocer que tipo de Blood axis nos ibamos a encontrar tras este período de silencio musical, y por lo que nos anticipa este single se dejar entrever un acercamiento a la música medieval y al folclore tradicional en perjuicio del factor apocalíptico de sus inicios. “The Dream” es el tema aportado por M. Moynihan y Annabel Lee, compuesto por una bella melodía recitada dulcemente al que acompañan, magistralmente, instrumentos como el violín y el teclado (R. Ferbrache), que completan entre coros la grandeza y nobleza de una adaptación lírica de un poema de Walther von der Vogelweide, considerado uno de los grandes poetas alemanes de la Edad Media. Para completar el single, Andrew King participa con otra composición que adapta, igualmente, un poema de Oswald von Wolkenstein del Siglo XV, cuyo retrato se incorpora en la portada de este tema, “Fröleichen so well wir”, en el que con su característica voz, perfecta para evocar la poesía de trovador y su temática amorosa, sabe mostrar las habilidades de un género con el que este artista ingles se intrega impecablemente, acompañado de importantes músicos como Hunter Barr, J. Murphy y A. Shliephake. El trabajo artístico que concluye este single es hermoso, secundado con imágenes que conforman la idea figurada de un tiempo lejano, próspero y fértil al que es fácil acceder e imaginar con artistas de este calibre. Un tesoro en forma de vinilo en 7’’, limitado a 500 copias que no pueda faltar en la colección de cualquier seguidor de folk tradicional. 8,8.
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