ELDAR. AMESHA SPENTAS.

Segundo trabajo de Eldar en el mítico sello Cold meat industry, tras una primera incursión en su factoría con el disco “Sapere aude” que recogía diversas colaboraciones y versiones de grupos afines al dúo catalán. Tal vez por ello, así como por el lanzamiento a través de Caustic records de su álbum “Amaterasu Shiroi”, la expectación de un nuevo álbum de Eldar, en su totalidad, donde se evidenciara su terminante aptitud y talento había ido creciendo progresivamente así como el interés por conocer los derroteros y el cariz propio de su estilo, tras varios trabajos relevantes en los últimos años. Pues bien, desde el principio este álbum expone un concepto ambiental que ha ido desarrollándose y tomando forma, aún bajo las mismas directrices de trabajos anteriores, para mostrarse consistente, homogéneo y con un grado de madurez importante. De esta forma, no es de extrañar que algunos temas como “Strange madness” o “The insurgents shots” se instalen poderosamente en la atención del oyente a modo de auténticos himnos, de estética bélica y estilo sumamente oscuro, en los que destaca el empleo de reiterativas y potentes percusiones. La profunda y distorsionada voz de Marc Merinee completa su verdadera identidad que culmina la impresión trágica o maligna, según corresponda en cada momento, con la que se articula la idea conceptual de este álbum, inspirado por distintos cuadros de Francisco de Goya, especialmente por la etapa de sus pinturas negras. Después de este comienzo tan abrumador, sobrevienen algunos temas imprescindibles como “The truth the history the time”, creador de un ambiente intangible y celeste que se sumerge en un sinfín de arreglos y sonidos, mientras que la solemnidad avanza entre oscuras melodías y la voz de Merce Spica en “Died the truth”, una pieza representantiva del estilo dark-ambient de corte marcial. La inspiración en los cuadros de Goya es aún más palpable con “Asmodea” donde el viento envuelve la magia e inquietante densidad de algunos pasajes que siguen, perturbadores, con el siguiente corte “Death beds” que aporta algún toque industrial a la arrebatadora fuerza con la que se extiende la espesura para finalmente concluir con “Satourn devouring one of his sons”, una composición que te atrapa en otra dimensión entre samplers, ruidos y voces infernales. No cabe duda que este “Amesha Spentas” es un álbum muy recomendado en el que se puede profundizar una y otra vez, descubriendo nuevos detalles en cada escucha y para lo cual es aconsejable volver a revisar la obra de uno de nuestros mejores pintores. Por si todo esto no fuera suficiente, Eldar también ha participado en la última publicación de la serie Scontrum, act IX, con tres temas inéditos que no pueden pasar por alto para todos aquellos interesados en la escena industrial y dark ambient. 9,0.