Entre el 5 y el 9 de Agosto de 2009 tenía lugar la séptima edición del Summer Darkness, uno de los festivales europeos de verano más importantes en lo relativo a música oscura en general, con todas las variantes y estilos que uno puede imaginar. Este año tuvimos la oportunidad de disfrutar y comprobar in situ la magnitud de este festival, cada vez mayor, con un programa que incluía a un total de 60 bandas confirmadas en un entorno envidiable que ya de por sí merece la pena desplazarse. Utrecht es una ciudad increíble, muy acogedora, con un gran atractivo cultural y turístico, que
te permite realizar multitud de actividades y dotada de una completa red ferroviaria para poder moverte con facilidad y en poco tiempo a cualquier otra ciudad de Holanda. En los últimos dos años este festival se ha ido extendiendo en número de días, pasando de los tres iniciales del fin de semana hasta los cinco de este año, si bien el grueso de los conciertos y el programa principal comienza el viernes. Con esta cantidad de artistas y grupos, hicimos nuestra selección de los conciertos que a priori parecían más interesantes; por ello llegamos el jueves 6 para recoger nuestra pulsera e introducirnos en la Tivoli Oudegracht, donde actuaban los magistrales Irfan, que demostraron el altísimo nivel de su música, con una gran cantidad de instrum
entos y una coordinación sensacional entre sus componentes, brillando con luz propia su vocalista y haciendo un buen repaso de sus dos discos (espectacular resultó “Hagia sophia” o "Return to outremer"), incluyendo también alguna que otra canción inédita. Uno de los mejores conciertos del festival y también uno de los que se me hicieron más cortos. A continuación llegaba Alexander Veljanov y su banda que se centró casi por completo en su álbum “Porta macedonia”, con el carisma habitual de este veterano músico en su hora y medi
a de actuación, recordando también grandes clásicos como “The man with the silver gun” o “Fly away” en su apoteósico final. El viernes 7 comenzaba la gran afluencia de público, muy heterogéneo, con el gran dilema que surgen habitualmente en estos festivales al coincidir en el mismo horario los cabezas de cartel, en este caso cerraban la noche en diferentes ubicaciones, Covenant, The birthday massacre y Sieben que actuaba en la impresionante iglesia del Dom. Tras una tarde conociendo la ciudad, y disfrutando del interesante y animado Market situado en la plaza Dom, presenciamos el 
directo de Dandelion Wine y su ecléctico estilo etéreo de dream pop, principalmente acústico y de agradable escucha en el escenario al aire libre. Por la noche, después de disfrutar del trayecto en bote por los canales que pone a disposición la organización para desplazarse de unas salas a otras, nos decidimos por ver el directo de The birthday massacre, a los que les precedía el gran Gothminister que derrochó energía, contagiando y haciendo vibrar a todos los asistentes que se reunieron en la Tivoli de Helling. Presentaban su último trabajo, “Happines in Darkness”, del que tomaron los temas más celebrados por el público entusiasta como “Dusk till dawn” o “Darkside”, mejorando su directo respecto a otra ocasión anterior en que tuve la oportunidad de verlos y realizando una actuación muy co
mpleta, que superó mis expectativas. A continuación la pequeña Chibi de “The birthday massacre” comenzó a tomar el protagonismo principal, mostrándose muy activa, saltando y participando con el gran número de seguidores que han conseguido estos canadienses. Una banda muy joven con una estética gótica de High school que hicieron un repaso de toda su discografía muy similar al su último álbum en directo, “Show and tell”, donde no faltó ninguno de sus éxitos. El sábado 8 se presentaba como el día con mayor número de actuaciones, destacando el Noise central festival que incluía un programa especial para los amantes de los sonidos experimentales, ambient, industrial, marcial o neofolk, en tres escenarios distintos. Empezando tempranamente por la actuación mañanera de Spherical Disrupted y The [Law-Rah] Collective y su dark ambient-drone, hasta bien entrada la mad
rugada con la noche industrial de la mano de Nullvektor, S.K.E.T. Klangstabil y MS Gentur. Entre medias se situaba el cartel más sugerente a mi gusto, con cuatro consolidadas formaciones que actuaban en la Sala Ekko (:Golgatha:, Brigther death now, Triarii y Derniere volonte). Después de visitar el Museum Catharijne-Convent y participar en un taller de escritura y pintura para comprender mejor el arte medieval de los valiosos manuscritos religiosos que alberga es
te monasterio, nos dirigimos al Ekko donde los alemanes :Golgatha: realizaron una actuación más que interesante, a medio camino entre canciones puramente darkfolk y el toque ritual de sus ambientes, ayudados por el canto de Birthe y la proyección de imágenes. Un concierto que disfruté intensamente con un repertorio de temas muy variado de sus diferentes álbumes, un par de canciones nuevas y una versión del clásico de Sol invictus, Death of the West. Por desgracia, para poder disfrutar de este concierto tuvimos que renunciar a otras dos actuaciones que coincidían al mismo tiemp
o, como las de Sieben, esta vez en el escenario del market y la de Rose Kemp en la Tivoli de Helling. Roger Karmanik sería el siguiente en subir al escenario junto a la colaboración de Marco Depla de Wertham, para dar su particular sesión de death-industrial de Brighter death now, momento que aprovechamos para acercarnos de nuevo a la plaza del Dom donde Celts without frontiers daban las instrucciones necesarias para realizar la danza ball folk que acompaña su dulce estilo de música con instrumentos como el harpa o el hurdy-gurdy. No tardamos en volver para ir cogiendo buen sitio, ya que los siguientes en actuar eran Triarii y la Sala Ekko estaba rebosando su capacidad. El directo que presenta su lider y alma mater, Christ
ian Erdmann, fue absolutamente impresionante, una verdadera demostración de marcialidad, de opresivos ambientes con una base pregrabada a la que acompañaban distintas percusiones que ejecutaban a la perfección el propio C.Erdamann y su compañero Axel Frank. Sin miramientos y con actitud firme interpretaron temas como “Fatalist”, “Europa”, “Roses 4 Rome”, “Mother of pain”, mientras se proyectaban escenas e imágenes durante los sesenta minutos de su setlist que pareció gustar a la totalidad de los que estábamos presentes. Después de un concierto tan espectacular parecía difícil mejorar lo que acabamos de ver, y así fue, ya que los siguientes en salir fueron Derniere Volonte. Desde mi punto de vista el proyecto de Ge
offroy D. fue la gran decepción del festival, con una puesta en escena apenas trabajada, una actitud no muy seria y unos temas que sonaron sin mucha energía donde el esfuerzo de Pierre Pi en las percusiones por realizar una actuación aceptable se desmerecía con Geoffroy D. que iba a su aire y en ocasiones entonando sin mucha fortuna. Sonaron temas en su mayoría provenientes del album “Devant le miroir”, e incluso la versión extendida de su último vinilo, “La Nuit revient”, sin ningún tipo de trabajo audiovisual que poder acompañar a su directo. No puedo comparar con otra actuación anterior de los franceses ya que era la primera vez que veía su directo. Una pequeña desilusión que me pareció entender compartido con parte del público que al principio llenaba la sala y en sus últimos temas, cada vez más bailables, iba a menos en asistencia. Tal vez por llegar a tiempo para ver el cabeza de cartel principal de esa noche, Front 242, que actuaba en la sala Tivoli Oudegracht. El domingo 9 finalizaba el festival con un programa igualmente variado que daba cabida al Black metal de Negura Bunget o el viking metal de Tyr y Korpiklaani o por otra parte en el Ekko club a un cartel variopinto con cuatro interesantes formaciones como Atomic neon, Katzenjammer kabarett, Other Day y Bacio di Tosca. Sin embargo el plato fuerte del día vendría con la actuación de Rosa Crvx y Suicide commmando. Los franceses desplegaron todo su aparatoso montaje sobre el escenario incluido piano, campanas y distintos tambores, acompañados por los cinco miembros del coro que respaldaron en todo momento a Oliver Tarab
o. Resultó un concierto espectacular por todo lo que ofrece Rosa Crvx, a nivel musical, por supuesto, y también en el plano visual que lo hace aún más espectacular, extendiendo banderas con el logo de la banda, invocando textos en latín o replicando campanas que han sabido integrar en el conjunto a lo largo de su extensa trayectoria. No se trata sólo del uso de instrumentos litúrgicos, resulta también muy atractivo comprobar como están completamente coordinadas las percusiones del BAM (Acoustic-midi drum), ese sistema inventado por el propio Oliver Tarabo para reproducir en directo tanta
percusión como un músico fantasma. Por supuesto sonaron los temas clásicos de siempre como “In tenebris”, “Adorasti”, “Aglon”, “Proficere” y no podía faltar “Elielo” conjuntamente con la espectacular performance de la “Danza de la tierra” que realizaron sobre una estructura improvisada en el centro de la sala. Una experiencia super recomendada a la que se añadió alguna otra sorpresa como algún tema inédito de Rosa Crvx, esperemos que sea presagio de un nuevo disco. El punto final llegaba con Suicide Commando, mostrándose Johan Van Roy en plena forma, sin parar ni un solo minuto y alentando al animado público que no paró de bailar durante toda su actuación. El setlist incluía canciones como “One nation 
under god”, “Blind, torture, kill”, “Hate me”, “Love breeds suicide” o “Hellraiser”, demostrando después de más quince años que Suicide Commando sigue siendo un valor seguro y referencia ineludible para muchos grupos de la escena Dark electro & industrial. Un broche final perfecto para todo un festival que resultó un éxito, con un cumplimiento puntual en el horario de conciertos, a veces con excesivo tiempo entre actuaciones, que por otra parte resultaba amenizado con distintos Djs, y en general con una organización impecable para acoger a un festival de gran dimensión y a un público que acudió de diferentes países.
te permite realizar multitud de actividades y dotada de una completa red ferroviaria para poder moverte con facilidad y en poco tiempo a cualquier otra ciudad de Holanda. En los últimos dos años este festival se ha ido extendiendo en número de días, pasando de los tres iniciales del fin de semana hasta los cinco de este año, si bien el grueso de los conciertos y el programa principal comienza el viernes. Con esta cantidad de artistas y grupos, hicimos nuestra selección de los conciertos que a priori parecían más interesantes; por ello llegamos el jueves 6 para recoger nuestra pulsera e introducirnos en la Tivoli Oudegracht, donde actuaban los magistrales Irfan, que demostraron el altísimo nivel de su música, con una gran cantidad de instrum
entos y una coordinación sensacional entre sus componentes, brillando con luz propia su vocalista y haciendo un buen repaso de sus dos discos (espectacular resultó “Hagia sophia” o "Return to outremer"), incluyendo también alguna que otra canción inédita. Uno de los mejores conciertos del festival y también uno de los que se me hicieron más cortos. A continuación llegaba Alexander Veljanov y su banda que se centró casi por completo en su álbum “Porta macedonia”, con el carisma habitual de este veterano músico en su hora y medi
a de actuación, recordando también grandes clásicos como “The man with the silver gun” o “Fly away” en su apoteósico final. El viernes 7 comenzaba la gran afluencia de público, muy heterogéneo, con el gran dilema que surgen habitualmente en estos festivales al coincidir en el mismo horario los cabezas de cartel, en este caso cerraban la noche en diferentes ubicaciones, Covenant, The birthday massacre y Sieben que actuaba en la impresionante iglesia del Dom. Tras una tarde conociendo la ciudad, y disfrutando del interesante y animado Market situado en la plaza Dom, presenciamos el 
directo de Dandelion Wine y su ecléctico estilo etéreo de dream pop, principalmente acústico y de agradable escucha en el escenario al aire libre. Por la noche, después de disfrutar del trayecto en bote por los canales que pone a disposición la organización para desplazarse de unas salas a otras, nos decidimos por ver el directo de The birthday massacre, a los que les precedía el gran Gothminister que derrochó energía, contagiando y haciendo vibrar a todos los asistentes que se reunieron en la Tivoli de Helling. Presentaban su último trabajo, “Happines in Darkness”, del que tomaron los temas más celebrados por el público entusiasta como “Dusk till dawn” o “Darkside”, mejorando su directo respecto a otra ocasión anterior en que tuve la oportunidad de verlos y realizando una actuación muy co
mpleta, que superó mis expectativas. A continuación la pequeña Chibi de “The birthday massacre” comenzó a tomar el protagonismo principal, mostrándose muy activa, saltando y participando con el gran número de seguidores que han conseguido estos canadienses. Una banda muy joven con una estética gótica de High school que hicieron un repaso de toda su discografía muy similar al su último álbum en directo, “Show and tell”, donde no faltó ninguno de sus éxitos. El sábado 8 se presentaba como el día con mayor número de actuaciones, destacando el Noise central festival que incluía un programa especial para los amantes de los sonidos experimentales, ambient, industrial, marcial o neofolk, en tres escenarios distintos. Empezando tempranamente por la actuación mañanera de Spherical Disrupted y The [Law-Rah] Collective y su dark ambient-drone, hasta bien entrada la mad
rugada con la noche industrial de la mano de Nullvektor, S.K.E.T. Klangstabil y MS Gentur. Entre medias se situaba el cartel más sugerente a mi gusto, con cuatro consolidadas formaciones que actuaban en la Sala Ekko (:Golgatha:, Brigther death now, Triarii y Derniere volonte). Después de visitar el Museum Catharijne-Convent y participar en un taller de escritura y pintura para comprender mejor el arte medieval de los valiosos manuscritos religiosos que alberga es
te monasterio, nos dirigimos al Ekko donde los alemanes :Golgatha: realizaron una actuación más que interesante, a medio camino entre canciones puramente darkfolk y el toque ritual de sus ambientes, ayudados por el canto de Birthe y la proyección de imágenes. Un concierto que disfruté intensamente con un repertorio de temas muy variado de sus diferentes álbumes, un par de canciones nuevas y una versión del clásico de Sol invictus, Death of the West. Por desgracia, para poder disfrutar de este concierto tuvimos que renunciar a otras dos actuaciones que coincidían al mismo tiemp
o, como las de Sieben, esta vez en el escenario del market y la de Rose Kemp en la Tivoli de Helling. Roger Karmanik sería el siguiente en subir al escenario junto a la colaboración de Marco Depla de Wertham, para dar su particular sesión de death-industrial de Brighter death now, momento que aprovechamos para acercarnos de nuevo a la plaza del Dom donde Celts without frontiers daban las instrucciones necesarias para realizar la danza ball folk que acompaña su dulce estilo de música con instrumentos como el harpa o el hurdy-gurdy. No tardamos en volver para ir cogiendo buen sitio, ya que los siguientes en actuar eran Triarii y la Sala Ekko estaba rebosando su capacidad. El directo que presenta su lider y alma mater, Christ
ian Erdmann, fue absolutamente impresionante, una verdadera demostración de marcialidad, de opresivos ambientes con una base pregrabada a la que acompañaban distintas percusiones que ejecutaban a la perfección el propio C.Erdamann y su compañero Axel Frank. Sin miramientos y con actitud firme interpretaron temas como “Fatalist”, “Europa”, “Roses 4 Rome”, “Mother of pain”, mientras se proyectaban escenas e imágenes durante los sesenta minutos de su setlist que pareció gustar a la totalidad de los que estábamos presentes. Después de un concierto tan espectacular parecía difícil mejorar lo que acabamos de ver, y así fue, ya que los siguientes en salir fueron Derniere Volonte. Desde mi punto de vista el proyecto de Ge
offroy D. fue la gran decepción del festival, con una puesta en escena apenas trabajada, una actitud no muy seria y unos temas que sonaron sin mucha energía donde el esfuerzo de Pierre Pi en las percusiones por realizar una actuación aceptable se desmerecía con Geoffroy D. que iba a su aire y en ocasiones entonando sin mucha fortuna. Sonaron temas en su mayoría provenientes del album “Devant le miroir”, e incluso la versión extendida de su último vinilo, “La Nuit revient”, sin ningún tipo de trabajo audiovisual que poder acompañar a su directo. No puedo comparar con otra actuación anterior de los franceses ya que era la primera vez que veía su directo. Una pequeña desilusión que me pareció entender compartido con parte del público que al principio llenaba la sala y en sus últimos temas, cada vez más bailables, iba a menos en asistencia. Tal vez por llegar a tiempo para ver el cabeza de cartel principal de esa noche, Front 242, que actuaba en la sala Tivoli Oudegracht. El domingo 9 finalizaba el festival con un programa igualmente variado que daba cabida al Black metal de Negura Bunget o el viking metal de Tyr y Korpiklaani o por otra parte en el Ekko club a un cartel variopinto con cuatro interesantes formaciones como Atomic neon, Katzenjammer kabarett, Other Day y Bacio di Tosca. Sin embargo el plato fuerte del día vendría con la actuación de Rosa Crvx y Suicide commmando. Los franceses desplegaron todo su aparatoso montaje sobre el escenario incluido piano, campanas y distintos tambores, acompañados por los cinco miembros del coro que respaldaron en todo momento a Oliver Tarab
o. Resultó un concierto espectacular por todo lo que ofrece Rosa Crvx, a nivel musical, por supuesto, y también en el plano visual que lo hace aún más espectacular, extendiendo banderas con el logo de la banda, invocando textos en latín o replicando campanas que han sabido integrar en el conjunto a lo largo de su extensa trayectoria. No se trata sólo del uso de instrumentos litúrgicos, resulta también muy atractivo comprobar como están completamente coordinadas las percusiones del BAM (Acoustic-midi drum), ese sistema inventado por el propio Oliver Tarabo para reproducir en directo tanta
percusión como un músico fantasma. Por supuesto sonaron los temas clásicos de siempre como “In tenebris”, “Adorasti”, “Aglon”, “Proficere” y no podía faltar “Elielo” conjuntamente con la espectacular performance de la “Danza de la tierra” que realizaron sobre una estructura improvisada en el centro de la sala. Una experiencia super recomendada a la que se añadió alguna otra sorpresa como algún tema inédito de Rosa Crvx, esperemos que sea presagio de un nuevo disco. El punto final llegaba con Suicide Commando, mostrándose Johan Van Roy en plena forma, sin parar ni un solo minuto y alentando al animado público que no paró de bailar durante toda su actuación. El setlist incluía canciones como “One nation 
under god”, “Blind, torture, kill”, “Hate me”, “Love breeds suicide” o “Hellraiser”, demostrando después de más quince años que Suicide Commando sigue siendo un valor seguro y referencia ineludible para muchos grupos de la escena Dark electro & industrial. Un broche final perfecto para todo un festival que resultó un éxito, con un cumplimiento puntual en el horario de conciertos, a veces con excesivo tiempo entre actuaciones, que por otra parte resultaba amenizado con distintos Djs, y en general con una organización impecable para acoger a un festival de gran dimensión y a un público que acudió de diferentes países.
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