sábado, 9 de octubre de 2010

DER ARBEITER. HOLZWEGE.


Cuando menos lo esperaba tuve noticia del segundo álbum completo de Der arbeiter, el proyecto personal del chileno Juan A., quien deslumbró hace unos años con un debut inusitado dentro de la escena neofolk, por su singular perspectiva de la música industrial de influencias marciales. Después de un largo paréntesis, en el que apenas pueden reseñarse contadas aportaciones a recopilaciones, en este 2010 se presentaba este “Holzwege” (limitado a 500 copias a través del sello Ur Muzik), al mismo tiempo en que se confirmaba su colaboración en la novena parte de la serie Scontrum, junto a Eldar y Llyr, cuyo último capítulo cuenta con tres magníficas canciones inéditas de Der arbeiter (un split super recomendado que merecería un comentario aparte). En este regreso apenas han variado los aspectos relevantes que le hizo destacar entonces, como el empleo de la lengua castellana en las canciones o los toques de electrónica que, aún estando presente, se ha visto relegada a un segundo plano. Una de las figuras clave que han influido en el proceso de creación de este trabajo es, sin duda, la del escritor Miguel Serrano, cuyos textos se pueden escuchar en varias cortes, con especial atención a “Estrella de la mañana”. El misticismo de su obra se plasma en el espíritu de este álbum, conservando la magia y fascinación por lo oculto, lo desconocido, todo aquello que el ser humano ahnela y no siempre se consigue, y por supuesto esa llama de eterno amor que perdura infinitamente. Algunas percusiones, voces pausadas y un oscuro romanticismo que deriva en un mayor uso de los instrumentos acústicos, son algunos de los componentes esenciales que permiten de este album una escucha placentera, relajante y con algunas reminiscencias del sonido mediterráneo. También existen versiones de clásicos propios, como “Hijo del sol” (Brewery In Piotrków Trybunalski), esta vez con voces femeninas o de otros artistas como “Wo die wilden kerle wohnen” del single de Allerseelen, bastante diferente a su original. En general, la guitarra acústica se convierte en protagonista, dando forma a la lírica decadente con un toque folk y bohemio, en temas como “Flores de Piedra”, o “Holzwege”. Como conclusión, al margen de etiquetas musicales y clichés reiterados, Der arbeiter crea su propio sonido, independiente y minimalista, revisando emociones olvidadas, sentimientos que puedan ser meditados en una tarde de otoño (hay un lugar donde al fin el mundo ya no gira más, hay un lugar donde ir, solo tú y yo). 8,3.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

hola, y donde lo puedo descargar, su musica es realmente bellisima

Anónimo dijo...

Compra el cd, no seas judío.