miércoles, 5 de mayo de 2010

WAPPENBUND. HEAVEN.


Casi sin esperarlo, Wappenbund irrumpe nuevamente en la resistencia marcial de pletóricas insignias que irradiaron años atrás creatividad e ingenio dentro del industrial más primario. Con sus características frecuencias electrónicas, coros heroicos e industriales ritmos, Maria Isabell y Sven Bussler regresaron a finales de 2009 con dos ediciones imprevistas, una en cassette denominada “Licht ist leben” y el presente mini cd, “Heaven”, tanto en versión normal como en box limitado que incluía una camiseta. Este proyecto alemán, aceptado como banda de culto, cuyos lanzamientos siempre se han convertido en un acontecimiento para sus seguidores, habían puesto un punto y aparte en su carrera con el anterior “Heimatflamme” que recopilaba a modo de despedida temas expuestos en singles descatalogados junto a otras composiciones inéditas. Por sorpresa, hemos acogido con agrado este mcd que reconduce el emblema y fragor de un sonido apocalíptico y marcial que nos resulta acostumbrado y conocido. De hecho, en los últimos años no son pocos los proyectos industriales que, fascinados por la estética bélica, han tomado como indicativo referencial sus industriales marchas fúnebres o militares. Tras unos inicios de mayor saturación en el ruido, surgían estructuras melódicas, no exentas de potencia aunque alejadas de la opresiva agresividad que marcaba la intensidad vocal de S. Bussler. En este punto, volvemos a situar a Wappenbund tras este período de inactividad y aunque se puede asegurar la mejoría que ha sufrido su sonido en cuanto a la producción, menos sucio que en otras ocasiones, las composiciones mantienen la misma disposición en las reiterativas percusiones y secuencias programadas. En “Caelum” se añaden algunas loops y coros épicos con el objeto de exhaltar el ardor y agitación de sus ambientes sobre bases marciales que van aumentando en intensidad a medida que se avanza en su desarrollo. La siguiente composición, “Der sieg des lichtes” prolonga, de forma magistral, la sensación rítmica de contundencia, lacerando cuanta debilidad encuentra a su paso, firme y sin respiro entre beligerantes. La calma llega con “Weisse asche” después de tanta hostilidad e intensidad, mostrando otra faceta oscura y decadente en su experimentación. Los amantes del género y otros proyectos similares como Stahlwerk 9 o Turbund Sturmwerk, seguramente disfrutarán de este mcd de tan solo 14 minutos que rescata los aspectos positivos del peculiar e indetificativo estilo de Wappenbund, mezcla de efectos orquestales con convicción de bases industriales y percusiones de tipo marcial. 8,5.

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