jueves, 25 de junio de 2009

ATARAXIA & ALLERSEELEN. ULTIMA THULE. 7".



“Ultima thule”, es todo aquel lugar alejado del mundo conocido, situado en muchos sitios y en ninguno, entre lo mítico ó lo real a lo largo de la historia e inspirador para artistas tan significativos como John Ronald Reuel Tolkien, autor de “El silmarillion” donde Ataraxia viene a desarrollar su canción “Lunar oceans” o Johann Wolfgang von Goethe y su “Fausto” en el que Allerseelen se detiene para componer su tema “Der König in Thule”. Dentro del universo tan amplio que abarca este single, se sitúa en aquel momento en el que el explorador griego Piteas se adentra en su viaje a la “Ultima thule”, límite exterior del mundo antiguo que se intenta plasmar en este trabajo, no solo en lo musical sino también en el aspecto visual y artístico del mismo con tres ediciones (alpha-omega-tetha) cada una con el vinilo 7” en distinto color (negro-azul-blanco), que incorporan textos, imágenes, un imaginario mapa de aquella tierra e incluso las propias conchas y plantas encontradas en el mar. La edición normal, sin camiseta ni añadidos, es igualmente atractiva y sustancial, conteniendo lo más importante, al fin y al cabo, que son los dos temas aportados por Ataraxia y Allerseelen. “Lunar oceans” es el primero de ellos, que corresponde a los italianos en el que vuelven a deleitarnos con la sensualidad de la incomparable voz de Francesca Nicoli y el mediterráneo aroma de sus melodías y acordes de guitarra. Por su parte Allerseelen ofrece una composición rítmica, intimista, “Der könig in thule”, donde Gerhard recita sobre unas bases programadas de percusión y sintetizador, descifrando pasajes ambientales, repetitivos que suenan sencillos pero precisos. Dos temas muy representativos de ambas formaciones, mostrando toda su magnitud y trascendencia dentro de las músicas neoclásicas, post-industriales o rituales como este single limitado (300, 150 y 50 copias, dependiendo de cada edición), hermoso en su presentación y recomendado en lo musical. Una obra completa a pesar de los escasos nueve minutos de duración. 8,3.

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