jueves, 10 de diciembre de 2009

Faith and the muse + Opus nigrum (29/11/09).

Después de varios años sin saber nada de Faith and the muse, en este año regresaban con nuevo disco y tour de presentación del mismo en el que se incluía una fecha en Madrid el pasado 29 de Noviembre, gracias a la organización de De profundis y el Culto que nos acercaron, una vez más, a William Faith y Monica Richards. A diferencia de su última visita, en acústico, en esta ocasión venían acompañados de un buen número de músicos, hasta un total de nueve personas en el escenario que realizaron un concierto verdaderamente impresionante. Pero antes de comentar lo que fue su actuación, ese día abría la velada una de los proyectos más prometedores de la escena nacional. Estamos hablando de Opus nigrum, cuyo disco “Journey in the dark”, ha tenido una gran acogida entre el público que sigue de cerca los sonidos etéreos y la música gótica de corte neoclásico. Para ese momento la Sala Ritmo y Compás ya contaba con una asistencia muy destacable en cuanto a número de personas para presenciar su directo que contó con un amplio setlist de canciones en el que se desgranaron temas como “Within the storm”, “The ashes” o “Salve regina”, acompañados de una puesta en escena más que interesante con una cantante muy participativa y un sonido que, pese a la gran cantidad de efectos grabados, resultó ser un excelente punto de partida tanto para el evento de esa noche como experiencia propia del proyecto liderado por Miguel LS. Poco después, Faith and the muse comenzarían, de la misma manera que lo hace su último álbum, con una breve introducción que sirve para adentrarnos en el concepto espiritual de origen japonés del Ankoku Butoh como manifestación de las diversas danzas que intentan exteriorizar los elementos más interiores del individuo a través de su cuerpo. Seguidamente le tocaba el turno a los temas más movidos de este último cd, como “Blessed” y “Battle hymn” con una fantástica Monica Richards que continúa poseyendo unas de las mejores voces del estilo gothic-darkwave. Y que decir de William Faith, un auténtico líder sobre el escenario, polivalente con distintos instrumentos, cantando temas tan extraordinarios como “Nine dragons” y mostrándose como un músico muy profesional a la vez que cercano y amable con el público con quien hablaba en perfecto castellano o latino. Toda la banda realizó una actuación excelente, pero no quiero dejar de señalar el fantástico trabajo conseguido en las percusiones, tanto en batería como en los tambores de gran tamaño, dándole una fuerza extraordinaria al sonido del directo. Para los fieles seguidores de siempre, se escucharon temas clásicos como “Scars flowm proud”, “In dreams of mine” o “Cantus” dejando un buen sabor de boca entre la generalidad del público que salían satisfechos con la actuación de los californianos. Definitivamente el mejor show que se podía imaginar de una banda como Faith and the muse, que tenía olvidada pero que ha recobrado todo su talento y energía con un nuevo álbum (Cd/Dvd/libro) y una gira europea que ponía su fin en Madrid.

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